El Papa Francisco, con ocasión de la XXXIII Jornada Mundial del Enfermo, nos invita a profundizar en el significado de la esperanza cristiana en medio del sufrimiento. Enmarcado en el Año Jubilar 2025, este mensaje resuena con especial fuerza al recordarnos que "la esperanza no defrauda" (Rm 5,5) y que, incluso en la tribulación, Dios nos sostiene y nos fortalece.
A menudo, la enfermedad nos enfrenta a nuestra fragilidad y nos sumerge en la incertidumbre. Sin embargo, el Santo Padre nos exhorta a descubrir en la enfermedad una oportunidad de encuentro con Dios. No se trata de una resignación pasiva, sino de una apertura a la gracia que nos permite experimentar la cercanía divina y la fortaleza que solo Él puede concedernos.
En su mensaje, el Papa Francisco destaca tres dimensiones esenciales de esta experiencia: el encuentro, el don y el compartir. El encuentro con Dios en la enfermedad nos transforma, nos ancla en una roca firme en medio de las tormentas de la vida. El don de la esperanza, recibido a través de la fe en la resurrección de Cristo, nos permite superar los momentos de prueba. Finalmente, el compartir nos recuerda que el sufrimiento no se vive en solitario: es un espacio de comunión donde todos —enfermos, cuidadores y familiares— se convierten en "ángeles de esperanza" unos para otros.
Esta reflexión encuentra un eco profundo en la llamada a la "cultura del cuidado" promovida en nuestro capítulo general. En un mundo marcado por la indiferencia y la fragmentación, el compromiso con el cuidado integral de la persona se convierte en un testimonio concreto de esperanza y misericordia. La solidaridad con los enfermos y el acompañamiento en el sufrimiento no solo dignifican la vida de quienes padecen, sino que también edifican comunidades más humanas y fraternas, donde el amor de Dios se hace presente a través de gestos cotidianos de compasión y entrega.
La Jornada Mundial del Enfermo es, por tanto, una ocasión para redescubrir la belleza de la solidaridad y la compasión. En los rostros de quienes sufren y de quienes los acompañan se refleja el amor de Dios, que nunca nos abandona.
Para leer el mensaje completo del Papa Francisco, visita: https://www.vatican.va/content/francesco/es/messages/sick/documents/20250114-giornata-malato.html