La hermana Diana Wauters, RA regresó a casa del Padre en la solemnidad de Corpus Christi, el 2 de junio de 2024, en St. Joseph Villa, cerca de Filadelfia, PA. Se encontraba en el año 81 de su vida y en el año sesenta y uno de su consagración religiosa como Religiosa de la Asunción.
Diana Wauters nació el 2 de octubre de 1942 en Greensboro, Carolina del Norte, fue la segunda de los tres hijos que tuvieron Joseph Wauters y Margaret Vercruyses. Ambos padres habían llegado a los Estados Unidos en su infancia desde Flandes (Bélgica) y, tras conocerse, se casaron y se convirtieron en ciudadanos estadounidenses. La familia se mudó a Allentown y Diana asistió a la escuela católica de allí hasta su último año, cuando se matriculó en la Academia Ravenhill y obtuvo su diploma de la escuela secundaria en junio de 1960.
En julio de ese mismo año Diana entró en la Asunción como postulante e hizo su Noviciado en Ravenhill, la Casa Provincial de Estados Unidos en Filadelfia. Cambió su nombre de bautismo por el religioso de José Teresa. Hizo sus primeros votos el 16 de julio de 1962, y eligió para su Misterio la Anunciación. Pronunció sus votos perpetuos en octubre de 1967, eligiendo como palabra bíblica grabada en su anillo: “Mi amado es mío, y yo soy suya” del Cantar de los Cantares.
Diana enseñó en las escuelas de la Asunción en St. Hugh, Miami y en la Academia Ravenhill mientras hacía su licenciatura en la Universidad St. Joseph, Filadelfia. En 1970, después de un tiempo de reflexión y diálogo, tras pedirlo, fue enviada por primera vez a la Provincia de África Occidental. Pasó seis años en Abidjan, Costa de Marfil enseñando en una escuela secundaria católica y formando parte de la fundación de la Comunidad de Attiécoubé, fueron pioneras al ser una de las primeras comunidades de la Congregación en fundar una “inserción” en un barrio pobre. Diana también jugó un papel decisivo en el lanzamiento de los “Campamentos Bíblicos”, un programa de formación bíblica de verano de dos semanas para niños dirigido por jóvenes, que luego desarrollaron las hermanas Jeanne Catherine y Cécile Thérèse de la comunidad de Attiécoubé y se extendió por otros lugares de la Congregación.
Al regresar a la Provincia de EE. UU. en 1976, Diana ayudó a fundar la primera comunidad de Worcester mientras estudiaba una Maestría en Trabajo Social en la Universidad de la Asunción y más tarde en la Universidad de Pensilvania, donde obtuvo su MSW antes de partir nuevamente hacia África Occidental en 1980.
Esta vez Diana fue enviada a Bobo-Dioulasso, Burkina Faso, como Consejera Provincial y Superiora de la Comunidad de Cana, otra inserción en el barrio pobre de Sarfalao. Durante el tiempo de Diana como Consejera se estableció el primer noviciado en África Occidental, y las hermanas de África Occidental formadas allí sentarían más tarde las bases de la actual Provincia Africana de la Asunción. Diana es recordada por muchas de las hermanas que allí se formaron, como lo atestigua este mensaje: “La recuerdo tan sencilla y humana, muy amable y fraterna, tan cercana a la gente. Gracias por los años que pasó con nosotros. África Occidental le está muy agradecida”.
Al final de su mandato en 1987, Diana pidió regresar a la Provincia de Estados Unidos, y la enviaron a la comunidad de Filadelfia Oeste, donde se unió a la primera parte del proceso de exploración y discernimiento para una fundación en la frontera suroeste.
Pero antes de la fundación de Chaparral, la Hna. Diana le pidieron el servicio a la Congregación y fue elegida Consejera General de Cristina González en 1994. Terminado su mandato regresó a los Estados Unidos en 2000, a tiempo para participar en las etapas finales de exploración en la frontera suroeste hasta que se eligió el sitio para la fundación. En 2001 se insertó en esta frontera la primera comunidad de cuatro hermanas (Diana junto con las hermanas Chabela, Tere y Dora), todas de diferentes nacionalidades y provincias, en Chaparral, Nuevo México, en la frontera entre Estados Unidos y México. La Hna. Diana explicaba así el objetivo de la comunidad: “Queríamos insertarnos en un barrio como comunidad religiosa. Seríamos una presencia en la comunidad y trabajaríamos con/en la comunidad. Esta visión significaba que la comunidad tendría que estar ubicada en un área lo suficientemente grande y densamente poblada para permitir múltiples oportunidades ministeriales, ya sea en ministerio pastoral o proyectos sociales. También deseábamos colaborar en la evangelización a través de la formación de Comunidades Cristianas de Base. Acompañar el camino de fe de las personas en y a través de sus luchas y alegrías cotidianas fue un componente clave de nuestro pensamiento”.
En 2006 la Provincia de Estados Unidos la eligió delegada al Capítulo General, donde fue nuevamente llamada al servicio de la congregación al ser elegida Superiora General por un período de seis años. La Hna. Diana permanecería en nuestra Casa Madre en París durante seis años acompañando la congregación a través de un período de Reestructuración, uniendo provincias más pequeñas a lo largo de líneas continentales. Durante este período tendrían lugar dos acontecimientos importantes: 1. El comienzo del proceso de fusión de la Congregación de las Religiosas Agustinas de Notre Dame de París con nuestra Congregación. 2. La tan esperada Canonización de Santa María Eugenia en 2007. Las hermanas que sirvieron con ella como Consejeras generales y las superioras provinciales relatan su estilo de liderazgo participativo y alentador, lo que hoy llamaríamos “sinodal”.
A su regreso a la Provincia de Estados Unidos en 2012, la Hna. Diana no tenía otro deseo que regresar a su amada misión en Chaparral. Eso hizo, hasta que el deterioro de su salud la obligó a mudarse a nuestra comunidad en Filadelfia en 2020, justo antes de que la COVID nos confinara. Chaparral y la gente de la Frontera siempre tuvieron un lugar especial en su corazón.
En febrero de 2023, cuando la progresión de su enfermedad se hizo muy grave, fue necesario que la Hna. Diana tuviera cuidados especiales. Las Hermanas de San José la acogieron en sus instalaciones de Saint Joseph Villa, donde recibiría atención competente, profesional y amorosa, hasta su muerte el 2 de junio de 2024, acompañada en todo momento por las hermanas de su querida provincia de USA. Expresamos nuestro agradecimiento con las últimas palabras de la Hna. Diana: “Diles que las quiero”.
El funeral de la Hna. Diana se celebrará en Filadelfia el 17 de junio a las 10:30 am en Saint Joseph Villa, 110 W. Wissahickon Ave, Flourtown. En la Casa Madre habrá una misa especial en su memoria durante el Capítulo General que tendrá lugar en julio para que toda la Congregación demos gracias por su vida y misión, así como celebremos su nueva vida.
¡Que descanse en Paz y en nuestros corazones!
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