"Cuando pensamos en Bélgica, evocamos algo pequeño y a la vez grande." Papa Francisco (Castillo de Laeken, 27/09/2024)
Del 26 al 29 de septiembre de 2024, el Papa Francisco visitó Bélgica en una estancia de dos días y medio, llena de actividades significativas. El programa incluyó sorpresas que se alejaron de la agenda oficial y que generaron un interés profundo y hasta polémico.
"¿Y si tuvieras que darle un color a la esperanza, cuál sería?" Con esta pregunta inicié el encuentro con los jóvenes el sábado, en un evento llamado Hope Happening. Lo que siguió fue una maravillosa explosión de color. Las respuestas de los jóvenes mostraron colores como símbolo de dulzura, calidez, pureza y futuro, cada uno expresando una esperanza llena de creatividad. Después, cada uno pintó esa esperanza y la acompañó con un versículo bíblico para regalarla a alguien que necesitara aliento. La alegría y entusiasmo de los jóvenes quedaron grabados en mí. Gracias al Papa Francisco por estar con nosotros. Katrin (Boitsfort)
"La Iglesia católica quiere ser una presencia... que brinde esperanza. Es interesante que la Esperanza se escriba con mayúscula: eso indica que no es algo que llevamos en una mochila; no, la esperanza es un don de Dios que llevamos en el corazón." Papa Francisco (Castillo de Laeken, 27/09/2024)
Dos momentos clave En Koekelberg, el Papa Francisco se reunió con representantes pastorales (obispos, sacerdotes, diáconos, profesores, capellanes y miembros de la vida consagrada). Se respondieron preguntas profundas planteadas por un sacerdote, una persona que trabaja con víctimas de abuso, una joven, un teólogo, una religiosa y un capellán de prisión, ofreciendo el Papa respuestas llenas de empatía. Fue gratificante sentir esa sintonía con mi Iglesia.
El domingo, la multitud. Personas de todas las edades, culturas y lenguas reunidas por Dios alrededor de un servidor venido de lejos. Fue como un pequeño anticipo del Cielo. Miriam del Cristo Jesús (Tournai)
Lo que percibí a través de la pantalla La energía de una multitud multicultural, jóvenes y adultos unidos en alegría, en distintos idiomas y colores. Me conmovieron los gestos del Papa, su cálido recibimiento a todos, en especial a los niños y personas frágiles. Marcienne (Boitsfort)