local_offer Sesiones

‘Permaneced en Mí, como Yo permanezco en vosotros' (Jn. 15 :4.)

eventDomingo, 17 Noviembre 2024

Ver las fotos

Boletín Final Comunidad Tercer Año 2023

TEMA: Juan 15:4a "Permaneced en mí, como yo permanezco en vosotros".

"Todo viene de Jesucristo. Todo pertenece a Jesucristo. Todo debe ser para Jesucristo". MME

 

Después de casi tres meses en la Casa Madre para la sesión del tercer año, ahora estamos cosechando las gracias recibidas. Nos gustaría compartir con ustedes de forma concisa lo que cada uno experimentó.

La experiencia del tercer año ha sido un momento de renovación y afirmación de que la gracia de Dios está obrando en mí. (Sor Martha Kamotho)

El tercer año ha sido un momento de renovación, bendición, aprendizaje de otras provincias y un tiempo de transformación. Se afirma que debo vivir mi vida al máximo en el momento presente amando a Dios, a mis hermanas y tener un espíritu de escucha y perdón mutuo con amor, paz y alegría. (Sor Anna Maria)

El tercer año para mí ha sido un momento de fortalecimiento de mi vida espiritual y de la unidad de vida de los tres polos: oración, comunidad y apostolado. (Sor Lucía)

El tercer año es una experiencia de transformación y gracia. (Sr. Precilla)

El tercer año para mí es la intimidad con Jesús, estar a su lado, hablar y escucharlo, y conocernos profundamente, reavivó el fuego del amor en mí. Como la mujer samaritana, encontré el agua viva. Estoy agradecido por todas las bendiciones. (Hermana Veena)

Mi experiencia de tercer año está llena de gracia y renovó mi corazón. (Sr. Visitación)

El tercer año para mí es una experiencia preciosa de ser amada, transformada y renovada. Dios me ha recreado para ser una nueva criatura con una nueva mente y un nuevo corazón. (Sor Marie Thu)

El tercer año es un momento lleno de gracia y una "leña" muy necesaria, para volver a encender el fuego dentro de nosotros, para que podamos seguir permaneciendo en Él con un amor y una pasión más profundos por Dios y por la Congregación. (Sr. Vicky)

Tercer Año ha sido una experiencia asombrosa y llena de gracia, que permitió un profundo encuentro espiritual con Cristo y creó un verdadero vínculo de solidaridad con las hermanas con las que caminé. (Sor Carolyn)

Para mi el tercer año, ha sido un tiempo de renovación, de fortalecer mi vida. Gozar la internacionalidad, beber de la Fuente para continuar mi vida con Jesus. Doy gracias a Dios por esta bendición y por cada hermana que ha aportado, para que se diera esta experiencia inolvidable.  (Sor Rosario)

Para mi el tercer año ha sido una experiencia de beber de la fuente, Dios y la congregación, nutrir mi fe interior. Sentirme amada, llamada por Dios, tiempo de sanación y transformación, espacio para conocer el Don de Dios en mi, me siento enviada a dar el mas. (Sor Lucrecia)

Gracias Señor por tu gran amor y misericordia, manifestada en mi durante este tercer año. (Sr. América)

¡Mi alimento es hacer la voluntad del Padre! Señor quiero permanecer en ti, con un corazón, ardiente, creativo y apasionado por tu Reino, guiada por la luz de tu Espíritu. (Sor Ma. Félix)

Recursos espirituales en el amor gratuito de Dios en una comunidad internacional, en la alegría de dar y recibir en compañía de nuestra Madre María Eugenia. (Sor Véronique)

Para mí es un ambiente de fraternidad en nuestro 3er año, especialmente en la oración. (Sor María Luisa)

El 3er año es un tiempo importante para revisar nuestras vidas, profundizar nuestra relación con Dios y vivir con la comunidad y el mundo. ( Sor Leontina)

Una experiencia de fe en Jesucristo Hijo de Dios, Hijo de Dios Salvador del mundo. (Sor Viviane Amegan)

 Un tiempo de acción de gracias, de alegría por volver a la Casa Madre, un tiempo privilegiado para recargar las pilas, para convertirme, para renovar mis relaciones con Dios y con los demás. ( Sor Odette Eugénie)

Una experiencia de cuidado de Dios, de uno mismo y de los demás. Intimidad interior, con Dios, cuidarse a través de la relectura, volver a la Santísima Trinidad, María Eugenia. Cuidar de los demás a través de la comunión y la escucha. (Sor Marie Claire)

Una experiencia de vivir profundamente con Dios, en profundo silencio, enraizada en Dios. Fidelidad, amistad con Dios, vivir la internacionalidad en la oración y en la comunidad. (Sor Bernadette)

Una acción de gracias. "Alabado seas, Señor, por habernos dado la alegría de servirte. Alabado seas, Señor, por habernos dado hermanos y hermanas a los que amar" y gracias a mi Provincia por haberme dado el tiempo y la disponibilidad para vivir esta experiencia. (Hermana Laure)

Un momento de renovación, de tejer mi relación con Dios y de comprometerme celosamente con el Reino de Dios. (Sor Alfonsina María)

Una experiencia de aceptación de mi vulnerabilidad, un proceso de liberación y libertad para la metanoia diaria. (Sor Pascalina)

Una experiencia de conexión con Dios, con mis hermanas de la Congregación y de la Provincia y conmigo misma. (Sor Christine Immaculée)

Mientras nos preparamos para regresar a nuestras respectivas Provincias, Sor Rekha nos da sus palabras de amor y sabiduría. Primero, respirar todo lo que podamos el espíritu de la Madre María Eugenia. Segundo, ser más compasivos cuando regresemos a nuestras Provincias. Tercero, ser el cambio que nos gustaría ver en nuestra comunidad. Ser una vela de luz que irradie alegría, pasión y amor como hijas fieles de María Eugenia, como discípulas de Jesús y como profetas del Señor.

Nuestros corazones están llenos de gratitud, alegría y amor.

Gracias al P. Noel, quien nos guió durante nuestro retiro de 30 días. Él viajó con nosotros en nuestra peregrinación interior para encontrarnos con nuestro Señor, con nosotros mismos y con los demás. Su sencillez, humildad, generosidad, santidad y sonrisa genuina realmente nos inspiraron.

Nuestro más sincero agradecimiento a la Comunidad General por organizar y hacer realidad este tercer año. Muchas gracias a todos ustedes. ¡Te amamos!

Nuestra gratitud a la Comunidad Auteuil, por la acogida, por las comidas y las liturgias que compartimos juntas. Gracias por ser parte de nuestro viaje.

Gracias también al personal que sirvió e hizo que nuestra estancia fuera lo más cómoda posible.

Gracias a nuestra comunidad de 3er año. Seguramente nos extrañaremos los unos a los otros, pero permanecemos en comunión en el amor fiel y misericordioso de Dios.

 

 

Quinto boletín - Comunidad del Tercer Año

La marcha continúa...

Tras la primera jornada libre del 1er de octubre, que fue un descanso refrescante, volvemos a la carga con el tema de la dimensión económica de nuestra vida y el espíritu de solidaridad. La dimensión económica es parte integrante de nuestra vida consagrada. Todas las acciones de nuestra vida tienen una dimensión económica, y nuestra manera de vivir los tres votos no es una excepción. Ciertas actitudes y medios, como el discernimiento, la transparencia, la dependencia en el uso de los bienes, la expresión sencilla y franca de nuestras necesidades, la limitación y revisión de nuestros bienes, el compartir en común... pueden ayudarnos a lograr una mayor coherencia.   Las superioras de todos los niveles son las primeras responsables de la vida económica. Asumen esta responsabilidad junto con las ecónomas que tienen una misión pedagógica. Pero cada hermana es responsable de la vida económica y del estilo de vida de la comunidad. Cada hermana, cualquiera que sea su misión y su responsabilidad, está llamada a dar cuenta del dinero y de los bienes que pasan por sus manos. Compartir entre comunidades, provincias/región y con los más pobres es una expresión concreta de nuestra solidaridad.

El 3 de octubre, continuamos nuestro proceso de formación con la Hermana Merche Méndez sobre el tema de las TIC[1] , redes sociales, misión y votos.

Se nos animó a profundizar en la cultura digital a partir de la invitación del Papa Francisco "La comunicación al servicio de la cultura del encuentro." El Papa nos dice que "Las redes sociales han traído consigo una ampliación de horizontes, que favorece la solidaridad y el respeto al otro en sus diferencias."

Merche nos planteó esta pregunta: "¿Cómo podemos humanizar el mundo de la comunicación?

Como educadoras, estamos llamadas a comunicar la verdad, la bondad y la belleza de Jesús y de su Palabra. Enseñar a nuestros alumnos a ser sabios, a aprender el arte de vivir, porque la inteligencia artificial no es más que recoger algo ya creado.

La nueva evangelización nace de la EXPERIENCIA DE DIOS, del encuentro con Jesucristo y del anuncio del Kerigma.

Se nos invita a no contribuir con las noticias falsas, a comprobar las fuentes de lo que recibimos como información, antes de difundirla.

Comuniquemos lo que es bueno, fomentemos el pensamiento positivo para promover la esperanza, la Buena Nueva. Si un contenido no construye cosas, decide no verlo, no escucharlo...

Otro llamamiento para nosotras y para nuestras comunidades: seguir creando una cultura de la comunicación, querer comunicar. A todos nos gusta recibir noticias, podemos ofrecer contenidos que muestren una imagen diferente del mundo, que evangelicen y aporten valor, que construyan el "cuerpo de la humanidad".

La solidaridad entre nosotras es importante, la cultura del cuidado también se vive en la red, debemos crear una cultura de la solidaridad.

Continuemos nuestro proceso sinodal, que nos ayudará a tomar decisiones juntas sobre la base del discernimiento comunitario, revisando los criterios de nuestras lecturas, las películas que vemos, las noticias que leemos y si las transmitimos o no, etc.

También es importante tener en cuenta los objetivos mundiales del desarrollo sostenible e implicar a niños y jóvenes en el cambio social y político.

El 4 de octubre, continuamos nuestro viaje con el tema JPICS[2] , guiadas por nuestra hermana Cécile Renouard. Conocimos el Campus de Transición que dirige con un grupo de personas que, como ella, han tomado la decisión de cuidar de nuestra casa común. Profesores universitarios, jóvenes profesionales y estudiantes viven y trabajan juntos en este campus, compartiendo una vida más sencilla y austera en favor del cuidado de la creación y de la dimensión social.

El objetivo de este proyecto es formar a responsables que puedan cambiar las reglas del juego en las políticas públicas, por ejemplo, subvencionando las energías renovables y aumentando los ingresos de los más pobres.

El objetivo de este Campus es cambiar la educación superior, creando un eco-campus en red con otras instituciones, al que puedan acudir estudiantes, profesionales o personas con proyectos de investigación sobre diversos temas.

En 2020 se publicó un manual de habilidades, redactado por más de 70 profesionales e inspirado en un método de enseñanza que integra la cabeza, el cuerpo, el corazón y todo nuestro ser, en relación con la naturaleza.

Cécile nos presentó seis puertas para vivir ecológicamente. Cada puerta tenía un nombre griego y una descripción que empezaba con un verbo que expresaba la acción:

  • "Oikos" (casa en griego) significa vivir en un mundo compartido.
  • "Ethos" (comportamiento): discernir y decidir vivir bien juntos.
  • "Logos" (palabra): interpretar, criticar e imaginar.
  • "Nomos (ley): medir, regular y gobernar.
  • "Praxis" (acción): pasar a la acción para afrontar los retos.
  • "Dynamis" (fuerza): reconectar con uno mismo, con los demás, con la naturaleza y con Dios.

"¿Cuál es mi pasarela preferida?"

"¿Qué discernimiento puedo hacer para integrar esta dimensión ecológica en mi vida y en mi comunidad?

"¿Cómo podemos utilizar estas seis puertas para vivir nuestra responsabilidad de cuidar nuestra casa común a través de cuestiones como la migración y la justicia?".

Para ilustrar esta parte de la reflexión, destacó una serie de virtudes ecológicas: humildad, cuidado, valentía, templanza, hospitalidad, justicia, esperanza, etc.

Continuamos esta reflexión con una actividad en el jardín: un diálogo entre generaciones. Algunas representábamos el presente y otras la generación futura 7e. Esto nos ayudó a darnos cuenta del impacto de nuestras acciones de hoy en las generaciones futuras, y de la urgente necesidad de que nos comprometamos a preservar un mundo habitable.

¡Demos gracias por la Creación y cuidémosla!

Después del tema sobre JPICS, pasamos dos días reflexionando sobre el tema: "La vida religiosa hoy: desafíos, abusos - acompañamiento".  La Hna. Mary Lembo, togolesa miembro de la Congregación de las Hermanas de Santa Catarina de Alejandría, formadora y psicoterapeuta fue quien nos acompañó durante dos días.

Las reflexiones y puestas en común sobre este tema nos permiten afirmar sin vacilar que el abuso en todas sus formas es una realidad en la sociedad, en la Iglesia, en la vida consagrada y en todas partes.  Como Congregación, quizás no estamos exentas de ello.  Hay muchas formas de abusos, que tienen sus raíces en el abuso de poder. Se nos desafía siempre a estar vigilantes con nosotras mismas y a nuestro alrededor, a ESCUCHAR SIN JUZGAR a las víctimas que podamos encontrar en nuestras comunidades y lugares de misión.  Se nos desafía a denunciar estas situaciones y sobre todo a trabajar, haciéndonos ayudar, para atender a las víctimas.  Y más aún, estamos invitadas a entrar en una cultura de la prevención a través de la sensibilización, pero sobre todo a través del compromiso de actuar para cuidarnos unas a otras en un entorno seguro y sano.     

¡Más vale prevenir que curar!

Domingo 8 de octubre, 7.30 h. Estamos en el autobús con algunas hermanas de la comunidad de Auteuil. Salimos de París hacia Normandía y Lisieux.

Aunque sólo vimos Les Buissonnets desde fuera (la casa estaba cerrada por la gran jornada de clausura de la Semana Teresiana -el jubileo del 150 aniversario de su nacimiento y el centenario de su canonización-), pudimos pedir a Santa Teresa su intercesión después de la misa en el convento de las Carmelitas y, sobre todo, en la basílica, donde sus reliquias estaban expuestas en un relicario dorado rodeado de rosas blancas. Las numerosas citas sobre su vida que estaban expuestas nos hicieron eco en las horas difíciles o alegres de nuestra vida consagrada. Una buena patrona para nuestro retiro.

El lunes 9, Sor Marta nos guió por el camino de la relectura de nuestra vida de fe tras las huellas de María, la joven discreta de Galilea, nuestra hermana en humanidad y nuestra madre siempre dispuesta a obtenernos gracias. Nos propuso mirarla en 3 etapas de su vida:

  • En la Anunciación, mostrando una fe sin reservas,
  • Luego, a lo largo de su vida, hubo momentos en los que profundizó en su fe, momentos de mayor comprensión del misterio que se estaba realizando (la Natividad y lo que le contaron los pastores, Simeón en el Templo, Jesús perdido y hallado en el Templo...).
  • En la noche de la fe, durante la Pasión de Jesús, al pie de la Cruz...

Las meditaciones y el compartir en grupos nos permitieron hacer la experiencia de un "corazón que ardía ", lleno de alegría por las gracias compartidas por cada persona en su vida de fe. Sí, ¡el Señor es bueno y fiel!

Por la tarde, un rosario internacional nos reunió en procesión en el jardín, con intenciones por las personas y las situaciones del mundo, y por la congregación.

Gracias por sus oraciones durante el retiro de 30 días, ¡y cuenten siempre con las nuestras!

 

[1] Tecnologías de la información y la comunicación

[2] Justicia, Paz, Integridad de la Creación, Solidaridad

 

Cuarto boletín - Comunidad del Tercer Año

 "Hay una sola piedra y es Jesucristo y es sobre Jesucristo que estamos edificados"

La semana del 24 al 30 de septiembre de 2023 nos sumergió de nuevo en nuestra espiritualidad de la Asunción en un fuerte tiempo de peregrinación entrando paso a paso en la experiencia de la Fundadora, Madre María Eugenia en Preisch, Metz y París.

  En un primer momento, Sor Véronique Thiebaut, nuestra archivista, nos presentó las circunstancias de la redacción de la primera parte de las Constituciones. En esta parte, MME explica el objetivo de la Fundación basada en la espiritualidad de la Orden de la Visitación que la inició en la vida religiosa y de la que extrajo las características de la vida comunitaria: benevolencia, dulzura, humildad, relaciones humanizadoras. Sin embargo, explica la diferencia entre las dos Órdenes, lo que hizo que no pudiera unirse a las Visitandinas cuando el P. Gros vio que la Fundación no crecía en estos términos: "Es un pensamiento de celo que está en el origen de la fundación…” El abate Gros, satisfecho, dio entonces su bendición para esta obra naciente.

A partir de ese momento, los obispos continuaron redactando las Constituciones, pero no sin encontrar dificultades por parte de los superiores eclesiásticos hasta su aprobación final. 

En 1871, MME comenzó a escribir las Instrucciones Capitulares, desarrolló el espíritu de la Asunción, en el cual encontramos: El desprendimiento que expresa nuestro modo de ser y hace una estrecha conexión con el misterio de la Encarnación; la adoración en la que nuestra vida expresa el amor de Dios y de Jesucristo que nos lleva a una renovación continua; nuestra vida, que debe ser ofrecida por el amor y para el amor, por un compromiso para la venida del Reino de Dios a través de la educación. Es así que ella insiste en estos términos: "Para nosotras, que combinamos la enseñanza con la adoración del Santísimo Sacramento, debemos ser monjas especialmente adoradoras" (27 de diciembre de 1874). 

La presentación de Sor Véronique siempre se enriqueció con una serie de experiencias personales y de vivencia de nuestro carisma.

En un segundo momento, los días 27 y 28 de septiembre se dedicaron a la peregrinación tras las huellas de Nuestra Madre María Eugenia bajo la guía de Sor Véronique. A las 8 de la mañana salimos de Auteuil en un autobús especialmente asignado para la ocasión. Nuestra ruta nos llevó a Preisch: visitamos la capilla de Santa María Magdalena donde fue bautizada MME y al final, el gran castillo para terminar con estaciones de oración en el jardín que hoy es propiedad de la familia Gargan. 

A las 6 de la tarde, fuimos a Metz. Allí, nos invitaron a misa en la parroquia de Ste Ségolène y continuamos nuestra peregrinación al día siguiente por la ciudad de Metz para descubrir los diferentes lugares donde vivió la familia MILLERET. Pudimos señalar: la residencia donde nació Anne-Eugénie, 12 Rue de Chanoine, la residencia de Théodore de Gargan, la Rue des Trinitaires, el lugar de su infancia, la Iglesia de Sainte Ségolène donde recibió su primera comunión y tuvo una experiencia mística que nunca olvidará. Todos estos momentos fueron para nosotros momentos de emociones fuertes, una experiencia viva que vivimos en compañía de nuestra MME. 

La historia de nuestra fundación también ha atravesado la ciudad de París: empezando por Auteuil, podemos mencionar el gran monasterio, el internado para niñas, por nombrar solo algunos. En nuestra casa actual en Auteuil, llamada "pequeño convento", visitamos dos lugares importantes: el jardín y el museo interno de la comunidad donde nuestras manos incluso tocaron la ropa de nuestras primeras Madres Marie-Eugénie y Thérèse Emmanuel. 

Y luego, en la explanada de la catedral de Notre Dame en París, nos unimos a nuestra MME escuchando el sermón de Lacordaire en un momento de silencio. Justo al lado de la Catedral se encuentra la primera casa fundacional de las Hermanas Agustinas de Notre Dame de París, cuyo dominio (Comunidad y apostolado de los enfermos) ha vuelto al Estado llamado "Hôtel-Dieu" con la misma misión de acoger a los enfermos, especialmente a los más pobres, hemos conmemorado a estas primeras Hermanas. Continuamos nuestro viaje a los diferentes lugares siguiendo los pasos de nuestra querida Madre María Eugenia en París.

Concluye así nuestra peregrinación, que ha renovado nuestra adhesión a Cristo a través de nuestra consagración a la Asunción tras las huellas de María Eugenia de Jesús. Podemos confirmar con ella: 

"Es Dios quien dirige todo".

 

 Tercer Boletín - Comunidad de Tercer Año

 

“Nunca mano más amorosa, ni más sabia puede guiar nuestro camino.” (M.M.E.)

 Seguimos caminando juntas…       

 

Contemplamos a María mujer que se pone en camino, en acción, se pone a la búsqueda de la voluntad de Dios y la obra que Dios realiza en ella, confirmado por la boca de Isabel, “Quien soy yo, para que venga a mi la Madre de mi Señor.” Lc, 1, 43.

Encuentro de dos Madres, dos Hijos, dos culturas, dos generaciones. María rompe el silencio, secreto sacando a la luz, el embarazo de Isabel, convirtiendo este encuentro en una gran alegría y alabanza; donde todo se mueve, las madres se abrazan, los hijos saltan de alegría, todo un actuar de Dios y el Espíritu en ellas. María confirma el anuncio del ángel por medio de las palabras de Isabel. Todo esto nos muestra como vivir el camino sinodal, estando disponibles, libres, para ponernos en salida hacia el encuentro de los invisibles. Discernir por donde se nos presenta Dios a nosotras.

La importancia de la oración en nuestra vida, Jesús nos da ejemplo nos lo dice el Evangelio de Lucas, Jesús oraba al iniciar la misión y al finalizar, después de una jornada de trabajo y para momentos importantes, la Transfiguración, elección de los Apóstoles, Huerto de Getsemaní, al final reza por los perseguidores. Toda nuestra vida es un combate espiritual, hay que cultivar cierta habilidad para descubrir por donde nos viene la tentación, a qué tengo que estar atenta, por dónde tengo que tener cuidado. Cuando mas estemos en una relación de confianza con Dios, mejor enfrentaremos y viviremos la situación que se nos presenta en el mundo.

La relectura, es un encuentro privilegiado con Dios y con nosotras mismas, cada día necesito hacer relectura, esta es una experiencia de encarnación, porque he tenido una experiencia de vida y me puede llevar a una experiencia de transformación, de conversión, de perdón, es una experiencia de humanización. Porque releer nuestros días y acontecimientos y si estoy atenta a estos acontecimientos, me doy cuenta que no soy la misma que ayer.

Releer y recoger todo lo que nos ocurre anta Dios y yo misma, descubrir como Dios nos conduce, es un ejercicio de verdad y transparencia, hay que tener actitud de perdón y alegría.

El Apostolado: Es parte de nuestra vida, un camino hacia la extensión del Reino, en comunidad, en Iglesia en salida sinodal. R. V. 75. “Cualquiera que sea su edad, su salud, sus talentos, todas son apóstoles por vocación.”

La misión es de Dios, Él es quien nos llama, es la historia de una respuesta a una llamada de amor. Jesús en un impulso de amor filial, nos llama a las religiosas de la Asunción, a vivir este amor en el corazón del Pueblo. Se nos invita a interpelarnos ¿Nuestros colegios son verdaderamente católicos? ¿Cómo lo hacemos? Nuestras actitudes, palabras… ¿Qué nos hace diferentes a los demás?

Estamos llamadas a revisar nuestra vida apostólica, ¿Cómo estamos viviendo la misión con los pobres?

¿Estamos transformándonos a causa de los pobres, en caridad y humildad? O nos hemos vuelto donadoras de cosas, convirtiéndonos, mas grandes que ellos. María Eugenia nos llama a ser contemplativas en la acción, amando a nuestras hermanas y aprendiendo de ellas a compartir sin miedo, porque el pobre, por más pobre que sea tiene algo que compartir. Que podamos descubrir a Dios en cada persona, con sus dones y diferencias. Nosotras somos las constructoras de la misión de María Eugenia, ¿yo estoy donando mi persona a la Asunción?, ¿Qué estoy haciendo? ¿Cómo lo estoy haciendo?  Invitación a Reflexionar y profundizar:

 ¿Has sido transformada por medio de tu vida Apostólica?

La importancia de la unidad en nuestra vida como Religiosas de la Asunción.

Se nos invitó a compartir en grupos, el santo que nos invita a vivir la unidad de vida, en ellos encontramos, una vida integrada, en la que Dios era su fuerza, y esto los llevó a vivir en coherencia, y ser fieles al proyecto de Dios, en sus vidas.

Nuestra vida personal y comunitaria, tiene que estar marcado por la unidad de vida, los tres polos, Vida de oración, comunitaria, apostólica. Viviendo en la presencia de Dios, como María Eugenia nos ha invitado, a ser lo que somos Religiosas de la Asunción, con la mayor plenitud posible. La importancia de poner los medios que nos ayudan a vivir la interioridad, estos pueden ser: el silencio, la lectura espiritual, la oración, la vida contemplativa; nos da la sencillez y la unidad de vida para poder vivir. Es importante preguntarnos ¿Qué te ha atraído a la Asunción?

Se nos invito a amar el paquete, en la Regla de Vida esta relacionado, como se entreteje, cada una debemos encontrar el equilibrio. Sin dejarnos arrastrar por el enemigo de la vida espiritual, el cansancio.

Con Clare Tersa hemos constatado, como Dios ha guiado la congregación a través de su fidelidad, en momentos difíciles fiadas en él, nuestras hermanas Generales, han guiado a la congregación. Aquí estamos gracias a la entrega de las hermanas que nos han precedido y las que continúan apostando por el Reino, en la misión confiada, desde el lugar de cada una bendición. Clare Teresa nos ha hecho un recorrido histórico de la Congregación, a través de su experiencia.

“No temas, ama y entrégate. Tu Dios será tu todo”. (M.E.).

 

 

Segundo Boletín - Comunidad de Tercer Año

“Permaneced en mí como yo permanezco en vosotros” Jn15:4

Esta semana nuestra Comunidad de 3er año vivió muchas actividades y encuentros con una misma y con las demás. Al estar en la Casa Madre, nos sentimos profundamente conectadas con toda la congregación. Hubo celebraciones de la vida por un lado y, por el otro, celebraciones de una vida más plena con Dios mientras nos uníamos en oraciones por la muerte de personas cercanas a nosotras. Durante la Misa dominical en nuestra Capilla, la Hna. Illuminata fue recibida y presentada como la Hermana Encargada de la Comunidad de Auteuil. También se presentó a los feligreses la Comunidad de Tercer Año. Tuvimos una pequeña celebración después de la Misa con todos los que estaban presentes. También celebramos el cumpleaños de Sor Marie Thu. Nos unimos a ella para agradecer al Señor por las bendiciones recibidas. Integramos en nuestra liturgia el Día de la Independencia de México. Agradecemos nuestras significativas celebraciones litúrgicas.

Estuvimos profundamente unidas con la Provincia de India por el fallecimiento de Sor Deepti el pasado 17 de septiembre de 2023. Se suponía que ella se uniría a nuestra comunidad de Tercer Año. Ella tenía 57 años. También oramos por el padre de nuestra querida Hna. Rekha, por Sor Fransisko Yozefu (Ruanda); Sor María Carmela (Asia Pacífico) de Filipinas. Estábamos también en comunión con los familiares de nuestras hermanas: el Señor Sherly, primo de la Sor Veena, que murió de un ataque al corazón el 13 de septiembre; el Señor Jean Marie, marido de la sobrina de Sor Marie Clare, que murió en un accidente el 10 de septiembre.

La vida siempre está evolucionando. Estamos llenos de gracia y bendiciones en esta semana debido a la valiosa presencia de nuestras queridas Hermanas como recursos que llenaron nuestras mentes y corazones de alegría y acción de gracias.

Sor Illuminata habló sobre el voto de Castidad y compartió con nosotras su experiencia de vida al vivir este voto en nuestros tiempos. Ella nos guió a través de la naturaleza afectiva de nuestras vidas y nos desafió a aprender a amar diciendo “No temas: ama y entrégate. Tu Dios será tu todo”. En el grupo compartimos los desafíos y las bendiciones que recibimos al ser fieles a este voto.

Luego fue el turno de Sor Françoise que compartió el voto de Obediencia. Nos explicó dos dimensiones de este voto: la vertical y la horizontal. Tomó referencias de la Biblia, de la Regla de Vida, de la obediencia de María Eugenia y de la obediencia en la tradición de la Congregación y de la Iglesia. Nos invitó a ver nuestras costumbres y tradiciones que no dan vida y más bien a estar atentas al Espíritu y responder en consecuencia. El Papa Francisco nos desafió a poner vino nuevo en odres nuevos. Seamos creativas en nuestra respuesta.

El voto de Pobreza fue el tema de Sor Leela Kottoor. Ella amplió nuestro horizonte a las nuevas realidades de nuestro tiempo, a las nuevas llamadas y desafíos que enfrentamos hoy en relación con este voto. Nos ayudó a reflexionar sobre los cuatro niveles de pobreza: pobreza intelectual, pobreza emocional, pobreza social y pobreza espiritual. Para muchas de nosotras fue como una experiencia que traspasó fronteras. Ella nos llevó a dialogar con la creación en relación a este voto. Las palabras que resonaron ese día fueron estas: somos signos, no salvadoras del mundo.

Sor Irene y Sor Marthe nos ayudaron a reflexionar sobre la importancia de los Votos vividos por cada una de nosotras. Tuvimos tiempo para la reflexión personal y compartimos su resultado en el grupo. Todos nos dimos cuenta de que teníamos más bendiciones que desafíos. Concluimos las reflexiones sobre los Votos renovándolos a los pies de Nuestro Señor.

Sor Martine Tapsoba nos iluminó sobre la importancia de la vida en comunidad y sobre nuestra internacionalidad e interculturalidad con su sabiduría y experiencia. Fuimos reafirmadas en el don de nuestra vida comunitaria y en la herencia de la internacionalidad. La conciencia de pertenencia a la Iglesia universal y a una Congregación internacional nos provocó asombro.                          

Sor Sophie Ramond nos iluminó sobre cómo orar con la Biblia y con los Salmos que cantamos todos los días. Pasamos un tiempo en Lectio Divina por grupos lingüísticos. Su intervención nos hizo reflexionar sobre nuestra vida personal y nuestra relación con Jesús.

Celebramos la maravilla de nuestra comunidad a través de nuestros diferentes momentos de recreación juntas. Continuamos compartiendo sobre las Provincias: Europa y Francia y África Oriental y África Occidental. Al escuchar el intercambio de las Provincias, vimos cómo se está llevando a cabo una educación transformadora en los diferentes apostolados de las Provincias y los desafíos que enfrentan debido al envejecimiento de las Hermanas en las Provincias. Al final de cada presentación las Hermanas entregaron un obsequio a cada una, obsequios traídos con mucho amor desde sus países.

También tuvimos una recreación creativa en el jardín. Se pidió a cada continente que presentara un juego para la recreación nocturna. Los juegos fueron tan interesantes y animados que el tiempo pasó muy rápido pero el espíritu nos mantuvo jugando y experimentando la alegría de ser hermanas.

 

Y comienza el CAMINO... ¡NOS REUNIMOS para PERMANECER EN ÉL! '

La vida es siempre un gran viaje que nos llama constantemente a salir de nosotros mismos para seguir el deseo que nos impulsa. Nuestro viaje a la tierra de M. María Eugenia puede haber tenido diferentes significados, rostros e historias, pero todo es un proceso de aprendizaje y crecimiento. Es un proceso de llegar a conocer nuestro deseo más profundo de poder estar con el resto de las participantes del 'Tercer Año' y las hermanas aquí en la Casa Madre. Cada una de nosotras recibió una calurosa bienvenida por parte de las hermanas: un viaje seguro desde el aeropuerto hasta la santuario de M. María Eugenia, a la capilla y a nuestras habitaciones. Nos emocionó ver cómo las hermanas nos hacían sentir tan especiales.

Nuestra semana comenzó con una liturgia de apertura sencilla, sin embargo, hermosa. A continuación, se nos pidió que escribiéramos, en una hoja de papel, la gracia que nos gustaría recibir durante la sesión. Un acto simbólico de colocar el deseo de cada una de nosotras -procedente de la única fuente- en la rama de un árbol donde las esperanzas de todas estaban íntimamente entrelazadas. Un buen recordatorio de que no podemos permanecer en Cristo al margen de Su Palabra: debemos estar conectados a Él y a Su creación.

El mensaje de apertura de la Hna. Rekha estuvo lleno de gracias y bendiciones. Se nos "animaba a entrar en el ritmo de la escucha atenta para que podamos ser transformadas y convertirnos en Buena Noticia para nuestras provincias".

Después de los aspectos prácticos sobre cómo utilizar los micrófonos, y una introducción al programa de lo que vamos a vivir durante los próximos tres meses, volvimos a visitar las historias de las zonas significativas del Jardín, la Capilla, y recorrimos toda la casa. Revivir la historia de las hermanas, que han caminado y rezado por los pasillos y jardines de la Casa Madre, unió nuestro camino de fe con el suyo, mientras pensábamos en todos los que nos seguirán.

La sesión de tres días de la Hna. Rekha sobre el “Evangelio de Juan” nos ayudó a intensificar nuestro encuentro con Jesús. La mayoría de nosotras tuvimos una experiencia que nos cambió la vida y nos condujo a un conocimiento y amor más profundos de Jesús. La teología de Juan acerca de la misión nos hizo conscientes de la "migración de Dios" desde los cielos, y del cambio que tenemos que hacer para seguir disfrutando de su presencia en cada una de nosotras y permanecer en su amor.

La sesión de la hermana Marthe acerca de "Construir Comunidad" nos llevó al terreno del crecimiento para comprender mejor lo que significa "soltar" lo que sea que nos impide confiar plenamente en el amor de Dios. Nuestro compartir nos ayudó a desprendernos, a rendirnos y a darnos cuenta de las señales que nos harán mejores miembros de nuestras comunidades.

Fue un día de diversión y de conocimiento, en el que descubrimos la belleza del corazón de unas y otras llenas de amor y la pasión por Dios. Verdaderamente, estamos entrelazadas y conectadas unas con otras por nuestro deseo de hacer de nuestras comunidades "una morada de Dios”. Nuestra vida está anclada en nuestra relación con Dios, y cada día construimos historias genuinas sobre nuestro encuentro diario con Él. La hermana Mary Cecilia nos dio espacio para el silencio, que nos ayudó a descansar en una fe más profunda. Cada una de nosotras está sostenida por algo más grande que nosotras mismas. Su charla sobre "Introducción a la experiencia religiosa" nos permitió descubrir un Amor Divino en todas nuestras experiencias, especialmente en los momentos de dificultad.

De pie en el "portal de la vida", nos preguntamos: "¿Quién soy yo?" en este momento de mi camino. Gracias a la hermana Anne Descour por guiarnos a afrontar nuestras emociones en las diferentes realidades de nuestra vida. Cuando nos preguntamos "¿Quién soy Yo?" es siempre en relación con el otro. Exploramos los ciclos de reacciones efectivas y no efectivas. Nos dio ejemplos de nuestras emociones primarias, descritas como el perseguidor y el retractor, que interactúan como pareja en una danza. Fue realmente maravilloso escuchar su genuino entusiasmo y aliento por lo que está sucediendo en nuestra vida, con nuestra comunidad y apostolado. A medida que avanzamos y crecemos en nuestra vida religiosa, debemos aprender y abrazar la vida y vivirla plenamente. Debemos esforzarnos por descubrir cómo bailar unas con otras en comunidad, haciendo todo lo posible por no pisarnos los pies entre nosotras. Cada interacción es vista como una oportunidad para aprender una nueva danza y perfeccionarla. Permaneciendo en Dios, tenemos el poder de amar y permanecer más en El.

¡Estamos agradecidos a Sor Irene, a Sor Marta y a todos los traductores por hacernos ir más allá de las barreras y celebrar el don de nuestra vocación!